La Federación fue la primera autoridad que respondió a Durango para atender el tema de la sequía, incluso se le criticó por haber enviado, supuestamente, sólo 3.5 millones de pesos para mitigar los efectos del fenómeno climático, situación que fue una mentira y se dio un manejo mediático doloso del adelanto que diera el Gobierno de la República en el tema del Fonden.
Tanto criticaron a la Federación por centrar en el Fonden los recursos para apoyar a los estados afectados por la sequía, pero ahora observamos con gran preocupación, que aquellos que señalaban al Fonden de lento y burocrático , son quienes han estado fallando en beneficiar a sus ciudadanos.
Como sabemos para el estado de Durango se autorizaron 184 millones de pesos etiquetados dentro del Fonden, de los cuales 92 corresponden al orden Federal, mientras que los otros 92 le compete aportación y aplicación al Estatal.
Es lamentable que el Gobierno del Estado y sus funcionarios se han dedicado a criticar a la Federación por su supuesta lentitud y falta de cumplimiento, pero no son capaces de reconocer que no sólo han fallado en la integración de proyectos ante Conagua, sino que además hasta el momento no han aplicado ni el 5 por ciento de los recursos que les corresponde aportar, en lo que se refleja su verdadera preocupación por mitigar los efectos de la sequía en Durango.
Hasta el momento, de las 37 obras autorizadas por la Federación para aplicar el Fonden en Durango, por parte de Conagua, se tienen en proceso 32, con un avance del 30 por ciento, de las cuales dos iniciaron desde febrero y el resto en marzo, mientras que el Gobierno del Estado, a través de CAED, sólo tiene una obra en proceso, con un avance del 30 por ciento, el resto, es decir, 49 no han iniciado, 7 de ellas podrían empezarse esta semana y 42 en mayo.
Paradójicamente, el costo de la obra que apenas ha iniciado el Gobierno de Durango, con los recursos del Fonden aportados por este mismo Estado, es de 3.5 millones de pesos, es decir la ínfima cantidad criticada por Priistas que se dijo era mínimo para atacar la sequía.
De igual forma, debemos recordar que la CAED aseguró entregar en tiempo y forma los anexos técnicos requeridos para autorizarse las obras, supuestamente desde febrero, pero la realidad muestra que fue hasta el 23 de marzo, cuando la dependencia estatal aportó dichos documentos.
Ante tal circunstancia, no podemos avalar, ni mucho menos reconocer el trabajo realizado hasta el momento por la CAED, ni tampoco estar de acuerdo en el informe presentado por la Comisión Especial, puesto que está sesgado, siendo parcial en su resultado, pues excluye las omisiones de la dependencia estatal.
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